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Un problema que ocurre hace 4 años

Casos de maltrato en "Mi Centro Canino"

Hematomas en los ojos, golpes en el lomo, expresiones de miedo y angustia. Es así como los vecinos de la localidad de Adrogué reciben a sus mascotas luego de retirarlas del centro de estética canino. Los damnificados se encuentran preocupados, pero nadie les brinda una solución a su problema.
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Mascota de Florencia Lugli, con lastimaduras en el ojo derecho.

“Mi Centro Canino” es una estética para mascotas ubicada en el municipio de Almirante Brown, en la Avenida Espora al 1375, dedicado principalmente a la limpieza y aseo de animales domésticos, que además comercializa productos para el cuidado animal y su alimentación. A su vez, venden distintas especies de animales de raza como perros y cobayos. 


El primer caso que salió a la luz fue el de la mascota de Florencia Lugli que ocurrió en el año 2015 y se denunció en la Comisaría 1ª de Adrogué. “Le lastimaron el ojo y la boca, son unas basuras, no se quieren hacer cargo. Dijeron que el perro se debe haber lastimado en la camioneta” publicó ella en Facebook. Florencia, con la colaboración de Carina Mascenik y Patricia Cotrone, efectuó la correspondiente denuncia acusando al centro de maltrato animal.

“Llevamos a Bella para que la bañen y le corten el pelo, cuando fuimos a buscarla tenía los dos ojos inyectados en sangre, el izquierdo totalmente inflamado. La dueña del lugar, quien le realizó el corte al principio negaba todo y después de una hora de discusión y gritos me terminó reconociendo que la había golpeado”

Esta denuncia fue realizada bajo la Ley 14.346, la cual condena a todo aquel que maltrate animales en diversas circunstancias, como la mala alimentación, violencia física o bien, tracción a sangre en el tiro de vehículos. Las personas que infrinjan esta ley pueden ser reprimidas con prisión de quince días a un año inclusive. 

 

Cuatro años después, sin represalias ni castigos de por medio, se produjo otro caso de violencia animal. Ariel Selleslagh, abogado y dueño de la mascota que fue víctima del maltrato, decidió llevarla allí para higienizarla. Sin tener conocimiento previo del hecho, confió en la profesionalidad de los empleados. “Llevamos a Bella para que la bañen y le corten el pelo, cuando fuimos a buscarla tenía los dos ojos inyectados en sangre, el izquierdo totalmente inflamado. La dueña del lugar, quien le realizó el corte al principio negaba todo y después de una hora de discusión y gritos me terminó reconociendo que la había golpeado”. Esto contaba Ariel en el descargo que realizó en su perfil de Facebook. 

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"Bella", la perra de la familia Selleslagh, con lastimaduras en la zona de sus ojos.

Su hijo, Facundo, contó que la llevaron de urgencia al veterinario y su diagnóstico fue desalentador. Luego de realizar una exhaustiva revisación a “Bella”, la mascota de la familia Selleslagh, les dijo que tenía las cejas lastimadas e inflamadas, así como también sus ojos inyectados en sangre. Por medio de un certificado veterinario, el Doctor Miguel Ayala del consultorio “Valet Center” dejó constancia de las agresiones sufridas por el animal. 

 

Gracias al testimonio otorgado por Carina, se dio a conocer que también hay quejas por parte de los vecinos del lugar relacionadas con un fuerte olor, descrito como “terrible” por Eva Iglesias (vecina de Adrogué) proveniente del centro estético. Por otro lado, Eva comentó que el centro tiene a los animales encerrados en jaulas bajo el sol y que intentó en reiteradas oportunidades que los cambien de ubicación. Pese a sus esfuerzos, la respuesta de los empleados fue “que no tenían espacio, e igualmente no sufren tanto las temperaturas como nosotros”. 

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Elisabet Fernandez, una defensora activa de los derechos animales, comentó que muchas personas optan por efectuar el escrache en forma de publicación en las redes sociales sin realizar la denuncia. Esto lo relaciona, por ejemplo, con el miedo que tienen los afectados a las posibles represalias que tome el maltratador, la falta de consecuencias para con el mismo, la ausencia de involucramiento de terceros, la carencia de apoyo por parte del Estado y la escasez de tiempo para llevar a cabo la denuncia. A su vez, explicó que, despotricando en las redes sociales y acosando a los maltratadores, no se obtendrá ningún beneficio para los animales, y la privación de efectuar una denuncia, hace que el maltrato animal se visualice como un comportamiento indeseable en vez de considerarse un delito. 

 

A su vez, Elisabet propuso algunas sugerencias para actuar de forma correcta ante un hecho de maltrato animal. En primera instancia, recomendó efectuar la denuncia en la fiscalía correspondiente a la localidad en la que ocurrió el caso para darle visibilidad. Por otro lado, sugirió conformar grupos de personas que estén dispuestas a colaborar en el proceso judicial, fortaleciendo la posición del denunciante frente al maltratador, dándole contención y acompañándolo para evitar que sienta temor a futuras represalias. Para finalizar, deslizó que otra opción es recurrir a organizaciones o asociaciones vinculadas con la defensa y protección de animales y sus derechos para recibir apoyo e información sobre los procedimientos legales relacionados con la denuncia.  

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Estos inconvenientes no suceden sólo con los perros, ya que gracias a la exposición de estos casos, Laura Klotz denunció lo que le ocurrió a ella y a su hija al comprar un loro en este centro. “Nos dijeron que era criado por ellos y con todos sus papeles supuestamente. Después de dos días el loro no quería comer el alimento. Al llevarlo a un veterinario de Berazategui, revisó al animal y nos dijo que estaba desnutrido por la alimentación que nos brindó el centro (harina de maíz, harina de arroz, girasol y mijo) y nos informó que esa no es la dieta que debe seguir un animal de esa especie” comenta Laura sobre su caso. 

 

En sus inicios, esta estética comenzó a recibir reseñas positivas por parte de sus clientes en la plataforma Google Mi Negocio debido a la amabilidad de sus empleados y su excelente atención para con el público, como por ejemplo “Hay de todo y te atienden amables” comenta Nancy Simonian, “Muy buena atención, muy recomendable, es una veterinaria excelente” opina Diego Aquino. Paulatinamente, a causa de los hechos comentados, se fueron presentando comentarios negativos acusando al lugar de maltratar a los animales. “Maltratan animales y los golpean para bañarlos” expresa con angustia Federico Villamayor. “Gente tengan cuidado. Maltratan a los animales para hacerle corte y baño” advierte Karina Ponzo, invitando a la gente a averiguar en las redes sobre los casos y denuncias que tiene este negocio. 

 

Los vecinos de Adrogué y alrededores empiezan a tomar conocimiento de los sucesos violentos y agresivos que ocurrieron en el centro de estética canino de la zona a causa de la visibilidad de los escraches en redes sociales. Sin la intervención inmediata de la municipalidad y de la policía, el lugar continúa impune y en funcionamiento. Se efectuaron denuncias, pero no hubieron respuestas. Los damnificados exigen justicia, pero sólo reciben silencio. 

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